Ocho señales que envía tu cuerpo si estás estresado
Cuántas veces sentiste que no das para más? Ni tu cabeza ni tu cuerpo
pueden soportar el peso de tus pensamientos. El trabajo, la vida
cotidiana, las preocupaciones personales... todos son factores que
pueden contribuir al aumento de tus niveles de estrés.
Hay
quienes llevan esta presión al extremo y, finalmente, terminan por
desarrollar síndromes de estrés crónico que pueden producir problemas de
saludimportantes, tanto físicos como mentales.
Desde un bajo nivel de
defensas en el cuerpo al insomnio, pasando incluso por afectar a tu
sistema digestivo.
Afortunadamente, el cuerpo
humano es una máquina muy bien engrasada y, antes de llegar a un grado
de estrés crónico preocupante, te enviará señales para que te des cuenta
de que ha llegado el momento de bajar el ritmo.
1. Dolor muscular
Cuando
estás estresado la tensión se acumula en los músculos y se pueden
producir lesiones. Así que, si notás esto, quizás es hora de intentar
rebajar un poco el ritmo y sacar tiempo para descansar un poco.
2. Dolor de cabeza
Sí,
la tensión también se acumula en la cabeza y te produce esos dolores
que pueden incluso nublarte la vista. ¿Nunca has tenido esa sensación de
ni siquiera poder pensar? Intentá hacer algunos ejercicios de
relajación y seguramente dejarás de notarlo.
3. Mucha sed
Cuando
tu cuerpo segrega muchas hormonas del estrés se pueden ver afectados
los niveles de fluidos del cuerpo. Por ese motivo, cada vez que estás
muy estresado no podés parar de beber de la botella de agua que guardás
en tu mesa para dar un trago a cada rato.
4. Mucho sudor
Al
igual que podés beber mucho, también se podrá experimentar hipehidrosis
o transpiración excesiva. Es un síntoma de estrés elevado,
prácticamente de ansiedad. Es recomendable respirar hondo y relajarte de
forma inmediata si eso te ocurre.
5. Adiós al pelo
No
es que vayas a perderlo todo, pero es cierto que en las épocas de mayor
estrés es posible que te des cuenta de cómo en tu cepillo queda más
cabello del habitual. Si empiezas a notar que es algo demasiado continuo
deberás visitar a tu médico.
6. Visitas el baño con frecuencia
Los
problemas estomacales que puede provocarte el estrés van desde los
calambres hasta las ganas de ir al baño casi constantes. Esta es una
señal de que tu estrés está alcanzando un nivel bastante alto, así que
tratá de encontrar un momento para relajarte antes de sufrir problemas
digestivos más graves.
7. Perdés o ganas peso
El
peso puede ser algo que varíe de día en día. Pero lo cierto es que, si
se producen cambios drásticos de peso, puede que sea una señal de que el
estrés al que estás sometido sea demasiado.
8. Pérdidas de memoria
Es
cierto que no todas evidencian un estrés grave pero, si se producen de
forma repetida, intenta relajarte. Son muchas las técnicas que puedes
probar, desde la meditación hasta simplemente respirar hondo y escuchar
algo de música relajante. Será mejor que las pongas en práctica antes de
que desarrolles un estrés crónico que haga esas pérdidas mayores.
Fuente: Universia Argentina
Etiquetas
Salud



Publicar un Comentario
No hay comentarios. :