Diarco compró a Cartellone la ex Molto en San Rafael
Con la promesa de cobrar todos el sueldo de octubre y, según se afirma, ninguna deuda patronal, los 472 empleados de la firma Frutícola San Rafael (ex Molto) de la firma Cartellone pasaron a ser dependientes de la cadena mayorista Diarco.
Según se conoció tras muchas negociaciones empresariales en la que intervino directamente el gobierno de Mendoza a través de la Subsecretaría de Industria y comercio a cargo de Guillermo Gustavo Cruz, se logró acordar con la compradora la continuidad laboral y mantenimiento de condiciones (antigüedad, cargos, etcétera) de los trabajadores de la frutera.
Otra de las novedades es que ya han empezado los contactos con productores locales, especialmente los más pequeños, para acordar los tratos para la próxima cosecha de frutas.
Cruz comentó que “el objetivo principal del acompañamiento por parte del Gobierno tuvo que ver con que, a pesar de la venta de la empresa, la totalidad de los empleados conservarán sus puestos de trabajos con las mismas condiciones que las actuales en cuanto a salarios, antigüedad, cargos, etcétera”.
Otro de los puntos que se pretendía garantizar era que se cumpliera con el plan de pago prometido por Cartellone en relación al atraso salarial que padecían los empleados, que se terminará de cumplir cuando se les abone el mes de octubre, quedando de esta manera al día.
Por su lado José Salcedo, gerente de Aceros Cuyo de Cartellone, encargado de las negociaciones con los empleados, en comunicación con Los Andes agradeció el acompañamiento del gobierno brindado durante todo el proceso de negociación, cuyos resultados “nos ponen muy contentos ya que todos los empleados de la empresa conservaron sus puestos de trabajo”, dijo Cruz.
Esta envasadora de frutas ubicada en plena avenida Mitre de la ciudad de San Rafael es una de las pocas fábricas que han subsistido los distintos avatares de la economía nacional y causaba gran preocupación su posible cierre por el efecto que tendría en la economía local ya afectada en esta temporada próxima por las fuertes heladas.
Hace poco cobró notoriedad pública el estado de la firma cuando empleados y productores se apostaron a la entrada de la fábrica para impedir una medida judicial que había ordenado entregar a la firma Coto, acreedora de Cartellone, gran cantidad de conservas y latas acopiadas en las instalaciones sanrafaelinas, que según los manifestantes eran el único seguro de cobro que tenían. Fue aquí precisamente cuando tomó cartas en el asunto la Subsecretaría, que luego de varias gestiones logró revertir la medida judicial.
A producir
No fue posible obtener datos ciertos sobre el monto abonado por Diarco ni cómo se arregló o se arreglará la deuda que Frutícola San Rafael mantiene o mantenía con los productores, la mayoría pequeños.
Lo cierto es que todo parece encaminarse a poner en actividad todo el complejo para la inminente temporada y comenzar a producir.
La firma adquirente
La empresa Diarco, propietaria de una cadena de supermercados, entre otros negocios, es liderada por el empresario Roberto Goldfarb y comenzó sus actividades hace 27 años con un supermercado en la avenida Rivadavia y un almacén por mayor en la zona Oeste de la Capital Federal.
Hoy está diversificado con locales en el Gran Buenos Aires, en la provincia de Buenos Aires, Capital Federal, Córdoba, Corrientes, La Pampa, La Rioja, Mendoza, Neuquén, Misiones, Chubut, y Río Negro.
Según se conoció tras muchas negociaciones empresariales en la que intervino directamente el gobierno de Mendoza a través de la Subsecretaría de Industria y comercio a cargo de Guillermo Gustavo Cruz, se logró acordar con la compradora la continuidad laboral y mantenimiento de condiciones (antigüedad, cargos, etcétera) de los trabajadores de la frutera.
Otra de las novedades es que ya han empezado los contactos con productores locales, especialmente los más pequeños, para acordar los tratos para la próxima cosecha de frutas.
Cruz comentó que “el objetivo principal del acompañamiento por parte del Gobierno tuvo que ver con que, a pesar de la venta de la empresa, la totalidad de los empleados conservarán sus puestos de trabajos con las mismas condiciones que las actuales en cuanto a salarios, antigüedad, cargos, etcétera”.
Otro de los puntos que se pretendía garantizar era que se cumpliera con el plan de pago prometido por Cartellone en relación al atraso salarial que padecían los empleados, que se terminará de cumplir cuando se les abone el mes de octubre, quedando de esta manera al día.
Por su lado José Salcedo, gerente de Aceros Cuyo de Cartellone, encargado de las negociaciones con los empleados, en comunicación con Los Andes agradeció el acompañamiento del gobierno brindado durante todo el proceso de negociación, cuyos resultados “nos ponen muy contentos ya que todos los empleados de la empresa conservaron sus puestos de trabajo”, dijo Cruz.
Esta envasadora de frutas ubicada en plena avenida Mitre de la ciudad de San Rafael es una de las pocas fábricas que han subsistido los distintos avatares de la economía nacional y causaba gran preocupación su posible cierre por el efecto que tendría en la economía local ya afectada en esta temporada próxima por las fuertes heladas.
Hace poco cobró notoriedad pública el estado de la firma cuando empleados y productores se apostaron a la entrada de la fábrica para impedir una medida judicial que había ordenado entregar a la firma Coto, acreedora de Cartellone, gran cantidad de conservas y latas acopiadas en las instalaciones sanrafaelinas, que según los manifestantes eran el único seguro de cobro que tenían. Fue aquí precisamente cuando tomó cartas en el asunto la Subsecretaría, que luego de varias gestiones logró revertir la medida judicial.
A producir
No fue posible obtener datos ciertos sobre el monto abonado por Diarco ni cómo se arregló o se arreglará la deuda que Frutícola San Rafael mantiene o mantenía con los productores, la mayoría pequeños.
Lo cierto es que todo parece encaminarse a poner en actividad todo el complejo para la inminente temporada y comenzar a producir.
La firma adquirente
La empresa Diarco, propietaria de una cadena de supermercados, entre otros negocios, es liderada por el empresario Roberto Goldfarb y comenzó sus actividades hace 27 años con un supermercado en la avenida Rivadavia y un almacén por mayor en la zona Oeste de la Capital Federal.
Hoy está diversificado con locales en el Gran Buenos Aires, en la provincia de Buenos Aires, Capital Federal, Córdoba, Corrientes, La Pampa, La Rioja, Mendoza, Neuquén, Misiones, Chubut, y Río Negro.
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