Durísimo reclamo del párroco de San Javier al gobernador Lifschitz
La ciudad de San Javier es la que tiene el más alto nivel de desempleo de la provincia y pobreza, que rondan el 40 por ciento", según su cura párroco, Sergio Capoccetti, quien ayer entregó una carta al gobernador, Miguel Lifschitz, que visitó esa localidad cabecera del departamento homónimo. En el texto, que autocalifica de "pedido urgente", y luego de mencionar una serie de falencias urbanas pone el acento en la situación del Samco local "cuyo edificio se viene abajo", dice, entre otras calamidades que describe para justificar la necesidad de que "sea intervenido por la provincia".
Fuentes ministeriales consultadas por este diario explicaron que en pocos días más desembarcarán en ese nosocomio un subdirector, el doctor Roberto Unger —quien actualmente está en Colonia Mascias—; un normalizador, el odontólogo Juan Pablo Academo, y un administrador, quien compartirá su atención también con la localidad de Helvecia, el licenciado Martín Durán.
Si bien más tarde la directora de Salud del Nodo Santa Fe, Natalia Anaya, confirmó que se está buscando dar solución a la conducción del Samco San Javier, se negó a ratificar los nombres trascendidos que "aún están en conversaciones". La funcionaria no desmintió al cura, aunque relativizó algunas de sus denuncias, y respecto de otras refirió las medidas que están tomando.
La carta. "Lo que más me preocupa es la situación agónica del hospital local. La ley Samco, el programa de los Nodos, las promesas y licitaciones incumplidas, la pobreza creciente, hacen que hoy el Samco de San Javier tenga una atención muy especial, y me animo a decir una pronta intervención provincial, y convertir este efector público en un hospital de autogestión. Hoy faltan profesionales, una sola pediatra para todos los niños (el otro cargo se perdió misteriosamente en manos de alguien), faltan insumos, no tenemos traumatólogo, no hay neonatólogo, no se atienden los partos, ni se hace un yeso, no hay equipos de rayos (el prometido hace cinco años nunca llegó), faltan ambulancias (porque hay que derivar todo a Santa Fe). El edificio se cae a pedazos", dice la carta que el cura publicó en Internet, tras dársela en mano al gobernador.
"El gobernador no sabía qué decía así, que no hubo ninguna reacción. Yo espero que cuando la lea la tome en cuenta. ¿Por qué me involucro? Porque la situación del Samco es calamitosa, y la gente no puede denunciar lo que sufre porque después tiene que ir de nuevo al hospital. Además es parte de mi compromiso como sacerdote. Es lo que nos pide el Papa Francisco. San Javier es la ciudad con más necesidades básicas insatisfechas", le dijo el cura Capoccetti a LaCapital.
Coincidencia. Anaya coincidió con el cura en dos aspectos fundamentales de su pedido: "Tenemos una enorme dificultad para conseguir recursos humanos", explicó en referencia a que los médicos no quieren ir a vivir a la ciudad pero no lo dijo así. El otro aspecto es que el edificio tiene falencias graves y urgentes. "Por eso hemos reactivado un expediente que heredamos de la gestión anterior y estamos actualizando costos para retechar el edificio y hacerle toda su instalación eléctrica nueva que son sus deficiencias más serias y prioritarias, pero ciertamente no sus únicos problemas de mantenimiento. En San Javier no hay otro sitio donde internar personas enfermas. Todo paciente, incluyendo quienes son atendidos en consultorios privados, a la hora de la internación tienen que ir al Samco y, si su caso es complejo, derivados a Santa Fe".
La directora de Salud del Nodo afirma, en cambio, que no es cierto como dice Capoccetti "que no funcione el aparato de radiología, tampoco que se haya discontinuado la provisión de insumos o que no haya ambulancias porque hay dos", y que el Samco "sólo atiende partos normales dado que otros casos se derivan a Santa Fe en función de que lo que se llama maternidades seguras que requiere de ciertas condiciones que allí no se pueden afianzar".
Capoccetti viene protagonizando una ya célebre confrontación con el intendente sanjavierino, el oficialista Mario Migno, a quien ayer volvió a criticar: "Hizo una política de avasallamiento de todas las instituciones. Sus dádivas buscan que las entidades dependan de la ayuda municipal. Como a mí no me compró para que aplauda sus acciones de patrón de estancia, no me quiere", se quejó, y dijo que le dio la carta a Lifschitz en su presencia y de la del senador departamental, el peronista José Baucero.
(imagen ilustrativa) |
Fuentes ministeriales consultadas por este diario explicaron que en pocos días más desembarcarán en ese nosocomio un subdirector, el doctor Roberto Unger —quien actualmente está en Colonia Mascias—; un normalizador, el odontólogo Juan Pablo Academo, y un administrador, quien compartirá su atención también con la localidad de Helvecia, el licenciado Martín Durán.
Si bien más tarde la directora de Salud del Nodo Santa Fe, Natalia Anaya, confirmó que se está buscando dar solución a la conducción del Samco San Javier, se negó a ratificar los nombres trascendidos que "aún están en conversaciones". La funcionaria no desmintió al cura, aunque relativizó algunas de sus denuncias, y respecto de otras refirió las medidas que están tomando.
La carta. "Lo que más me preocupa es la situación agónica del hospital local. La ley Samco, el programa de los Nodos, las promesas y licitaciones incumplidas, la pobreza creciente, hacen que hoy el Samco de San Javier tenga una atención muy especial, y me animo a decir una pronta intervención provincial, y convertir este efector público en un hospital de autogestión. Hoy faltan profesionales, una sola pediatra para todos los niños (el otro cargo se perdió misteriosamente en manos de alguien), faltan insumos, no tenemos traumatólogo, no hay neonatólogo, no se atienden los partos, ni se hace un yeso, no hay equipos de rayos (el prometido hace cinco años nunca llegó), faltan ambulancias (porque hay que derivar todo a Santa Fe). El edificio se cae a pedazos", dice la carta que el cura publicó en Internet, tras dársela en mano al gobernador.
"El gobernador no sabía qué decía así, que no hubo ninguna reacción. Yo espero que cuando la lea la tome en cuenta. ¿Por qué me involucro? Porque la situación del Samco es calamitosa, y la gente no puede denunciar lo que sufre porque después tiene que ir de nuevo al hospital. Además es parte de mi compromiso como sacerdote. Es lo que nos pide el Papa Francisco. San Javier es la ciudad con más necesidades básicas insatisfechas", le dijo el cura Capoccetti a LaCapital.
Coincidencia. Anaya coincidió con el cura en dos aspectos fundamentales de su pedido: "Tenemos una enorme dificultad para conseguir recursos humanos", explicó en referencia a que los médicos no quieren ir a vivir a la ciudad pero no lo dijo así. El otro aspecto es que el edificio tiene falencias graves y urgentes. "Por eso hemos reactivado un expediente que heredamos de la gestión anterior y estamos actualizando costos para retechar el edificio y hacerle toda su instalación eléctrica nueva que son sus deficiencias más serias y prioritarias, pero ciertamente no sus únicos problemas de mantenimiento. En San Javier no hay otro sitio donde internar personas enfermas. Todo paciente, incluyendo quienes son atendidos en consultorios privados, a la hora de la internación tienen que ir al Samco y, si su caso es complejo, derivados a Santa Fe".
La directora de Salud del Nodo afirma, en cambio, que no es cierto como dice Capoccetti "que no funcione el aparato de radiología, tampoco que se haya discontinuado la provisión de insumos o que no haya ambulancias porque hay dos", y que el Samco "sólo atiende partos normales dado que otros casos se derivan a Santa Fe en función de que lo que se llama maternidades seguras que requiere de ciertas condiciones que allí no se pueden afianzar".
Capoccetti viene protagonizando una ya célebre confrontación con el intendente sanjavierino, el oficialista Mario Migno, a quien ayer volvió a criticar: "Hizo una política de avasallamiento de todas las instituciones. Sus dádivas buscan que las entidades dependan de la ayuda municipal. Como a mí no me compró para que aplauda sus acciones de patrón de estancia, no me quiere", se quejó, y dijo que le dio la carta a Lifschitz en su presencia y de la del senador departamental, el peronista José Baucero.
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