Dejar de fumar no es fácil, pero tampoco imposible
Se conoce científicamente que el acto de fumar es una enfermedad que causa una dependencia psicosocial y física.
La dependencia psicológica: es el hábito que se asocia con situaciones diarias como tomar café, sobremesa, conducir, leer, relajarse, el cigarrillo se convierte en la solución de problemas, etc. Es parte de la personalidad del fumador y por lo tanto no resulta fácil de modificar.
La dependencia social: se basa en la aceptación social del tabaquismo y en las presiones ambientales que incitan al consumo de tabaco. Actualmente, fumar es socialmente menos aceptable.
La dependencia física: la responsable de ella es la nicotina, una droga que se encuentra en forma natural en el tabaco. Es altamente adictiva, tanto como la heroína y la cocaína. Por eso, pocos son los fumadores que pueden liberarse del cigarrillo debido a los síntomas de abstinencia: ansiedad, nerviosismo, agresividad, insomnio, desconcentración.
De tal manera sabemos que, los que sufren un infarto de miocardio y muchos afectados de otras enfermedades persisten en seguir fumando a pesar de conocer perfectamente el riesgo de sus padecimientos.
Dejar de fumar no es fácil, pero no imposible. No existen tratamientos efectivos, mágicos ni milagrosos que garanticen que se curó o dejo de fumar definitivamente, únicamente son ayudas para lograr la recuperación del adicto. Independientemente de la cantidad, el tiempo que fumó, cuando el fumador decide dejarlo, puede hacerlo, existen tratamientos que facilitan y ayudan a liberarse de la adicción.
La terapia-Lasér es una ayuda, que alivia los síntomas del síndrome de abstinencia física y, se complementan con la voluntad del paciente, en lo que corresponde a la dependencia psico-social.
NOTA: tome este artículo de manera informativa, ante cualquier síntoma que padezca concurra a su médico.
INVERTA EN SU FUTURO ¡DEJE DE FUMAR AHORA!, llegara con más capacidad física y mental, disfrutando de una mejor calidad de vida
La dependencia psicológica: es el hábito que se asocia con situaciones diarias como tomar café, sobremesa, conducir, leer, relajarse, el cigarrillo se convierte en la solución de problemas, etc. Es parte de la personalidad del fumador y por lo tanto no resulta fácil de modificar.
La dependencia social: se basa en la aceptación social del tabaquismo y en las presiones ambientales que incitan al consumo de tabaco. Actualmente, fumar es socialmente menos aceptable.
La dependencia física: la responsable de ella es la nicotina, una droga que se encuentra en forma natural en el tabaco. Es altamente adictiva, tanto como la heroína y la cocaína. Por eso, pocos son los fumadores que pueden liberarse del cigarrillo debido a los síntomas de abstinencia: ansiedad, nerviosismo, agresividad, insomnio, desconcentración.
De tal manera sabemos que, los que sufren un infarto de miocardio y muchos afectados de otras enfermedades persisten en seguir fumando a pesar de conocer perfectamente el riesgo de sus padecimientos.
Dejar de fumar no es fácil, pero no imposible. No existen tratamientos efectivos, mágicos ni milagrosos que garanticen que se curó o dejo de fumar definitivamente, únicamente son ayudas para lograr la recuperación del adicto. Independientemente de la cantidad, el tiempo que fumó, cuando el fumador decide dejarlo, puede hacerlo, existen tratamientos que facilitan y ayudan a liberarse de la adicción.
La terapia-Lasér es una ayuda, que alivia los síntomas del síndrome de abstinencia física y, se complementan con la voluntad del paciente, en lo que corresponde a la dependencia psico-social.
NOTA: tome este artículo de manera informativa, ante cualquier síntoma que padezca concurra a su médico.
INVERTA EN SU FUTURO ¡DEJE DE FUMAR AHORA!, llegara con más capacidad física y mental, disfrutando de una mejor calidad de vida
Etiquetas
Salud
Publicar un Comentario
No hay comentarios. :